NUEVA YORK._ Alex Rodríguez, es defendido por  dominicanos residentes en el Alto Manhattan,  su barrio natal, aunque unos pocos lo atacan.  En la composición gráfica momentos de julio del 2009,  cuando visitó el vecindario.

NUEVA YORK._ Inmediatamente se anunció la sanción de excluir al tercera base de los Yankees, Alex Rodríguez de 211 juegos por supuestamente comprobarse que usó sustancias prohibidas por las Grandes Ligas durante un tratamiento en una clínica biogenética de La Florida, cientos de dominicanos comenzaron a inundar las redes sociales con base en esta ciudad en su defensa, aunque muchos lo hicieron en contra.

La reacción defensiva a favor del toletero, se trasladó a las calles de Washington Heights (Alto Manhattan), el barrio más poblado por dominicanos en el mundo  y hubo quienes hasta se atrevieron a proponer que "deberíamos reunir un numeroso grupo my quemar las fotos del comisionado Bud Selig y el gerente de los Yankees Brian Cashman", frente al estadio del equipo".

Manuel Tejada, quien asegura ser un apasionado del béisbol, dijo esperar que Alex no sea definitivamente expulsado del terreno por tanto tiempo y mostró esperanza de que pueda revertir la decisión en apelación.

Ramón Ramírez, sostiene que aunque Rodríguez pudo haber cometido el error, "la cosa no era tanto".

Añadió que si bien el pelotero debe responder por su responsabilidad, hay que tomar en cuenta que siempre lo ha dado todo en los estadios con cada equipo con los que ha jugado.

"No es posible, que ahora Cashman y los demás del equipo de los Yankees, quieran abandonarlo o darle la espalda en un momento tan difícil para Alex", señaló Agustín Pérez.

Para dominicanas como Altagracia Feliz, Alex Rodríguez "es un emblema para los dominicanos y la ciudad y además, nació en este barrio del Alto Manhattan".

Julio Rodríguez se quejó de que las Grandes Ligas tratan de ensañarse contra el slugger y no se la ha impuesto el mismo castigo que a otros como Nelson Cruz, Johnny Peralta y el venezolano Everth Cabrera.

"Hay muchos, pero muchos otros peloteros norteamericanos blancos y negros que han hecho peor que Alex y a nadie se le ocurrió castigarlos de una manera tan descomunal", añadió Rodríguez que aclaró no es pariente del atleta.

"Alex es una superestrella, juega en une quipo que es un símbolo del deporte mundial, no importando en la posición en que esté en la temporada y por eso, se enciman más contra él que sobre los otros", expresó María Guzmán, quien relató que antes de conocer a Alex como pelotero no era seguidora asidua del béisbol.

"El equipo tiene salir a defenderlo y no botarlo como si fuera nadie", dijo por su parte Ramón de la Cruz.

La última vez que Alex visitó el barrio donde nació y se crió fue en julio del 2009, concitando el respaldo de cientos de residentes, mayoritariamente niños, jóvenes y adolescente, pero entre cuya multitud estaban también adultos y hasta algunos de mucha edad.

Se codeó con una gran parte de sus seguidores, tomó en sus manos la bandera dominicana, abrazó y firmó autógrafos y luego entró al restaurante "El Nuevo Caridad" en la calle 191 y avenida Saint Nicholas, donde hasta se puso la bata y el birrete de "chef", estuvo en la concina y fungió como "camarero" sierviendo platos y refrescos a docenas de seguidores y aspirantes a peloteros profesionales que estaban en el evento.

El propietario del restaurante, Miguel Montás, un fanático de los Yankees y admirador de todos los peloteros dominicanos, organizó la actividad y fue el anfitrión principal.

El lunes en Chicago y en medio de otra derrota que hunde más a su equipo 8-1, Alex dijo que está más firme que nunca y que apelará la sanción, esperando que haya un proceso limpio y justo en el que su situación se aclare.

18 peloteros vinculados a la clínica biogenética de Miami también fueron castigados, pero en el caso de Ryan Braun, este sólo fue suspendido por 85 juegos.

De los 18, 12 latinoamericanos corren la misma suerte.

"Sólo espero que haya un final feliz en algún momento", dijo Alex que bateó de 4-1. "He sido sometido a cirugías de cadera. "Todo esto ha sido muy desafiante y estoy que se cometieron errores en el camino, pero aquí estoy. Soy un ser humano y estoy luchando por mi vida", agregó el superestrella Yankee.

"Tengo que defenderme a mí mismo, porque si no, nadie lo hará. Hay un proceso y estoy contento con ello y a su debido tiempo, esperaré el resultado", terminó diciendo el pelotero mejor pagado, más cotizado, admirado y criticado de las Grandes Ligas.